RELIGIÓN DEL MILENIO: LOS JEDI

Publicado por "El Mundo", Madrid, 20/10/2012, sobre la invasión a una mezquita por parte de ultra derechistas en Francia:

"Hemos elegido Poitiers para este acto reivindicativo porque fue aquí donde Carlos Martel rechazó, en el año 732, al ejército invasor musulmán de Abderrabán", ha declarado uno de los implicados a BFMTV. Los ultras accedieron a la mezquita –que aún se halla en obras– alrededor de las 7.00 de la mañana del sábado y colocaron en la azotea carteles exigiendo "un referéndum sobre la emigración extra-comunitaria y sobre la construcción de nuevas mezquitas".

Cercados por las fuerzas del orden público, los radicales se avinieron a desalojar el edificio religioso islámico a primera hora de la tarde. El líder Philippe Vardon y dos de sus lugartenientes que se declararon organizadores de la ocupación fueron detenidos por orden del fiscal de Poitiers, Nicolas Jacquet, que sopesa igualmente imputarles el cargo de robo, ya que durante su acción reivindicativa el grupo se apoderó de una valiosa alfombra de oración que fue subida a la azotea y resultó gravemente dañada por la lluvia". (Diario "El Mundo", Madrid).

Al respecto, J. Tof comenta: 

"Lo único que existe es el presente. Y el futuro, quizás. Ambos vienen y se marchan cada vez más rápido. El pasado es madera quemada. Sus  hechos, su contenido, altamente ficcionales. Cambian, se amoldan a los intereses de quien los usa. Vivir reivindicando deudas de generaciones anteriores, o es pura estupidez o está plagado de intereses malévolos que son un lastre inaceptable para los tiempos que se avecinan.

Mirar con recelo al nieto de un oficial nazi es tener la necesidad de perpetuar aquella situación para justificar quien sabe qué injusticias y arbitrariedades actuales. Cuando no para obtener beneficios económicos de eso. Recriminar a los turcos de hoy los desmanes del imperio otomano, más de lo mismo. Sería como pedirle cuentas  a Putin por las purgas sangrientas de la Union Soviética. Nadie lo hace, que yo sepa. Claro, eso no daría ningún lucro, y Rusia tiene firmeza de carácter y armamento nuclear.

Gracias al progreso científico y tecnológico, el milenio que se inicia encierra promesas para la humanidad que resultaban inconcebibles sólo décadas atrás: longevidad sorprendente, cambios de alimentación, interacción con prótesis mecánicas y electrónicas de todo tipo. Expansión de la conciencia y del pensamiento, comunicación con todo el resto de la humanidad al instante. Frente a esta enorme oportunidad, seguir con rencores religiosos, políticos o étnicos de antaño es de una ridiculez tal, que resulta inconcebible.

Se impone lo nuevo en forma avasallante. Es, entonces, necesaria una Religión por sobre todas las otras, entendida como el re encuentro definitivo de la humanidad como lo que es: un todo único e indivisible que debe dejar el máximo espacio posible a la individualidad.

Esta supra religión no implicará la eliminación de las viejas, por oxidadas que estén.
Pero el Nuevo Milenio debe dar lugar solamente para aquellas religiones que garanticen elementos incontestables como la libertad de acceso y deserción, igualdad y tolerancia completa para con el prójimo de cualquier origen, gusto o pensamiento. También el respeto por la integridad física de los fieles, considerando cualquier mutilación como una intrusión inadmisible en la libertad individual.

Religiones e ideologías que no garanticen principios básicos como estos, seguramente responden a intereses ocultos de dominio y rencor y  serán un escollo, un foco de odio y discriminación que debe ser extirpado.

La humanidad tiene que dar el paso adelante que significará el ser humano del siglo XXI. Quien mantenga lo contrario, es pasto de la usura espiritual de los  reyezuelos de la mídia, o de tradiciones momificantes. Profetas del  “divide y reinarás”.  

Un signo de la necesidad de pasar a redactar las Escrituras de la nueva humanidad, la dio la sociedad de Nueva Zelanda, donde en el censo de 2001, la segunda religión después del cristianismo fue, de acuerdo a lo declarado por la población , la de los "Jedi".
El haber sido una respuesta bromista, le otorga más peso al asunto. 
No olvidar que Nueva Zelanda es un país multi étncio de avanzada. Y que los Jedi (de "Star Wars"), tienen todos los elementos de cualquier orden religiosa: pertenecen a un universo ficticio, son fieles a una tradición, tienen un código filosófico y moral escrito. Obedecen a una jerarquía establecida y luchan por el bien (ver http://es.wikipedia.org/wiki/Jedi).

Extracto traducido de la obra "Melting Siberia", de Joshua Tof.