Armagedón


“Así es, (si así os parece)”, decía Pirandello.
fotos: Max Trent. Rights reserved.
 En lo subjetivo, parece fácil todo. Hasta terminar el mundo. Alcanzaría con que cada uno, a partir de hoy, modificara un par de cosas. Una individual y una que involucre al colectivo. 
Cada cual sabe qué: lo siempre dejado igual, aunque sea obvio que sería mejor cambiar.
Por pequeñas que fuesen, resultarían quince mil millones de variaciones en el sentir humano. De mejoras. O sea, sería otra humanidad.

En lo objetivo, la profecía daba estas fechas como fin de los tiempos. El fin del mundo.
Y el mundo terminó. Sobran las demostraciones.
Quien nace hoy tiene más del doble de esperanza de vida que los nacidos hace sólo cien años. Se rejuvenecen células, se “fabrican” órganos, se alarga la vida al equivalente a 130 años humanos en ratones. Esto es del 2012.
El computador personal ha posibilitado la expansión inimaginable de varias funciones  propias del cerebro.
A la vez que se avanza a velocidad asombrosa en el conocimiento de las zonas oscuras universales, se encuentran los motivos ocultos de la totalidad del ADN. Y esto también es del 2012.

Nunca hubo tanto futuro como ahora. Nunca tantas posibilidades individuales y colectivas. Nunca se estuvo tan cerca de abolir ortodoxias ideológicas, religiosas, nacionalismos y otras tonterías.
La vieja tierra presa en dogmas sofocantes, deja de existir. 
Sin cualquier atisbo de duda, enfrentamos un mundo nuevo.  

Feliz nacimiento, entonces.
 FELIZ NAVIDAD.


Comentarios

Entradas populares de este blog